Noticia de la NASA ....

La NASA ha hallado en la superficie de la Luna lo que podrían ser los restos de una nave espacial que se estrelló contra el satélite en 1967, informa Space.com.
Lunar Reconnaissance Orbiter Camera LROC
La NASA ha hallado en la superficie de la Luna lo que podrían ser los restos de una nave espacial que se estrelló contra el satélite en 1967, informa Space.com.
Lunar Reconnaissance Orbiter Camera LROC
El poeta José Antonio Muñoz Rojas, que el próximo 9 de octubre hubiera cumplido cien años, falleció la pasada noche en Antequera (Málaga), según informaron fuentes municipales.
El autor, Premio Nacional de Poesía (1998) y Reina Sofía de Poesía Iberoamericana (2002), pertenece al grupo de poetas neorrenacentistas y fue fundador, junto a José Antonio Maravall, Leopoldo Panero y José R. Santeiro, de la Nueva Revista, al tiempo que mantuvo contactos con varios poetas de la Generación del 27.
José Antonio Muñoz Rojas era Hijo Predilecto de Andalucía, cuenta con la Medalla de Oro de la ciudad de Antequera y la Medalla de Honor de la Real Academia de Bellas Artes de San Telmo. Este año, con motivo de la celebración del centenario de su nacimiento, la Junta de Andalucía lo ha declarado Autor del Año, junto a Antonio Machado.
Precisamente con este motivo se han organizado varios actos que culminarán con un congreso internacional en el que se debatirá la aportación del poeta a la literatura española, cuya inauguración estaba prevista para el próximo 8 de octubre, víspera del cumpleaños del escritor. El congreso coincidirá con la apertura de una exposición conmemorativa en la que se planteará un recorrido cronológico sobre aquellos aspectos biográficos que han marcado la actividad literaria de Muñoz Rojas.
Muñoz Rojas había sufrido un debilitamiento de su salud en los últimos días, y había asegurado a su amigo Juan Benítez que aguardaba la muerte. Benítez, coordinador de las actividades del centenario del poeta y amigo personal del fallecido, ha señalado que el escritor se había negado en los últimos días a ingerir alimentos sólidos y estaba convencido de que se iba a producir en breve su fallecimiento.
Según ha relatado, hace diez días fue a verlo para ver cómo estaba y éste le dijo: "Aquí, esperando", y cuando le preguntó: ¿Esperando el qué?, Muñoz Rojas le contestó: "La muerte".
"No tenía ningún problema físico, simplemente, estaba harto de vivir", ha comentado Benítez, quien ha añadido que "Antequera ha perdido a la mayor personalidad de las letras que ha tenido nunca".
Desde el pasado viernes se había producido un empeoramiento de su estado de salud, ya que solamente ingería líquidos, y a pesar de su extrema delgadez, el poeta mantuvo una gran lucidez mental hasta el último momento, según Benítez. El escritor asumió con serenidad la proximidad de la muerte y "pensaba que tenía que haberse ido con sus compañeros de generación, a los que nunca le gustó haber sobrevivido", ha recordado su amigo.
Muñoz Rojas se mantuvo ajeno a las celebraciones y homenajes, como los programados con motivo de la próxima celebración del centenario de su nacimiento, que se conmemora el 9 de octubre. "No perdáis el tiempo", solía decir a los estudiosos y escritores durante los últimos meses asistieron al ciclo de conferencias sobre su obra organizado por el Ayuntamiento de Antequera.
El presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, ha trasladado hoy sus condolencias a la familia del poeta y ha asegurado que el antequerano era "uno de los grandes maestros de la poesía del siglo XX". Griñán, que se encuentra de visita oficial en Marruecos, ha lamentado en su nombre y en el del Gobierno andaluz el fallecimiento del escritor, que "en su fecunda vejez servía de guía para muchos jóvenes escritores", según un comunicado de la Oficina del Portavoz en una nota.
El Consistorio antequerano ha suspendido los actos programados para esta jornada, festividad de la Policía Local, y tras celebrar un pleno extraordinario ha decidido declarar tres días de luto oficial -hoy, mañana y pasado- por el fallecimiento del poeta local. El alcalde de la localidad malagueña, Ricardo Millán, ha anunciado que no obstante se mantendrá el programa de actos organizado con motivo del centenario del nacimiento del autor, que servirán como "homenaje" al escritor.
Millán, que ha afirmado que hoy es un día "tremendamente triste" para la ciudad porque ha fallecido "su personaje más ilustre de los últimos tiempos", ha recordado que el programa conmemorativo del centenario incluye un congreso internacional de poetas y una exposición.
El alcalde ha confirmado también que la capilla ardiente se ha instalado en la residencia de José Antonio Muñoz Rojas, en la casería del Conde, mientras que el funeral se oficiará mañana a las 12:00 en la iglesia de Las Descalzas y posteriormente será enterrado en el panteón familiar del cementerio de Antequera.
"Lo ha sido todo en el mundo de la literatura, reconocido a nivel nacional, pero aparte de la categoría profesional que tenía destacaba por su humanidad, sencillez y cariño por su ciudad", ha declarado Millán.
La familia del escritor prefiere mantener la intimidad durante estas horas y que mañana se celebre el acto público, aunque "será difícil, al ser un personaje universal", ha explicado. "Al final se va a quedar sin vivir los actos de homenaje, algo que no le gustaba mucho, ya que era una persona con un carácter discreto y humilde", según el alcalde.
Muñoz Rojas murió de forma "plácida", rodeado de sus cinco hijos vivos, según ha informado hoy su primogénito, Rafael Muñoz. "Durante sus últimos días ha estado muy plácidamente y tranquilamente, muy relajado e incluso estaba bastante dispuesto a morir", ha indicado Muñoz, quien ha salido a atender a los medios a las puertas del domicilio familiar donde tiene lugar la capilla ardiente.
Ha afirmado que su padre no tenía enfermedad alguna, pero que con casi cien años, "al negarse a comer y beber durante unos diez días, el cuerpo se le ha ido debilitando". El hijo del poeta ha manifestado que están recibiendo llamadas de muchos familiares que tiene en España y que poco a poco se van desplazando a Antequera los más allegados, como los nietos del poeta.
La capilla ardiente se ha previsto exclusivamente para familiares cercanos y esta tarde está prevista una misa íntima en la capilla privada de la Casería del Conde, y mañana se oficiará un acto público a las 12:00 en la Iglesia de Las Descalzas de Antequera.
"Nunca como antes y siempre como antes. Son los lugares mismos, la mano misma que te escribe. ¿El agua misma la que corría entonces? Estas luces de finales de mayo, son las del mayo aquel, cuando entre los granados me dijiste: Te quiero como nunca. Yo te dije: No me hables de nuncas que no existen, sino de siempres nuestros para siempre, o quizá todavías que nos aguardan".
El poeta uruguayo, de 88 años, se encontraba ingresado en el hospital desde el pasado 24 de abril
Una noticia tristísima para mi y para todos los que tenemos la suerte de albergar un pizca de sensibilidad....
Gracias por las buenas horas que pasé (y por las que volveré a pasar) leyendo sus obras....
Descanse en paz...
Hay mucho material inédito; cuadernos sin revisar y apuntes a la espera....
Hay tanto polvo en la tapa que ni se percibe el color de la libreta, se adivinan unas palabras escritas en español. Es un cuaderno para alumnos de colegio, sencillo, que se compra en cualquier tienda por unos céntimos. En la New York Public Library dicen que todas las obras de Jack Kerouac, padre de la generación beat, fueron descubiertas. Pero el pequeño cuaderno se durmió bajo el polvo de los archivos del autor del mítico En el camino.
“Las letras están muy juntas, escritas con un lápiz. Es difícil de entender, aunque no había duda: estaba leyendo una novela que Kerouac había escrito en francés”. Al abrir hace unas semanas aquella libreta, el periodista canadiense Gabriel Anctil descubrió lo que nadie sospechaba: una obra inédita del escritor estadounidense. Es la segunda que encuentra en los archivos de Nueva York y asegura que “aún queda mucho por descubrir”.
Sin la curiosidad y sobre todo sin las capacidades lingüísticas de Anctil, quizá la obra de Kerouac seguiría durmiendo. Sur le chemin es un texto corto, de unas 50 páginas, aunque hay que ser quebecquense para entender las primeras líneas. Kerouac lo escribió en el estilo literario que le dio fama, característico del movimiento beat: la prosa espontánea. Escribía como hablaba la gente de los barrios populares, con las expresiones y las faltas de gramática.
Los aficionados pueden intentar descifrarlo, pero ni un francés nativo entiende con claridad lo que Kerouac, hijo de inmigrantes canadienses, quiso expresar. El sentido sólo se adivina. El texto está escrito en joual, dialecto popular de Quebec. Para el periodista Anctil, la dificultad de entender el texto explica por qué nadie le prestó atención durante más de 50 años: “Los estadounidenses simplemente no comprendían lo que estaba escrito y se olvidaron. Además, desconocen la importancia de la identidad francófona de Kerouac”, explica.
Antes de morir, el 21 de octubre de 1969, el portavoz de la generación beat había declarado en varias ocasiones que había escrito en francés. “El problema es que era un alcohólico en los últimos años de su vida y se contradecía mucho”, apunta Anctil. Corrían rumores sobre obras inéditas de Kerouac, sin que nadie encontrara nada.
Escrita en 1952 durante una estancia en México, en la casa del también escritor William Burroughs, Sur le chemin –obra anterior y distinta a En el camino– “muestra la voluntad de Kerouac de publicar en su lengua materna”, explica el periodista. El manuscrito revela dos maneras de pensar distintas, dos personalidades. En la libreta, también hay breves textos en inglés. La letra está cuidada, es legible. En francés, todo lo contrario.
En los años cincuenta, Kerouac viajaba mucho y vivía en la más absoluta pobreza. Sólo escribía. Tardó cinco días con Sur le chemin, escrito de un tirón, “como contar una historia a un amigo con una cerveza”, dijo Kerouac.
El protagonista de la novela se llama Ti Jean, el mismo nombre con el que el autor firmaba las cartas que escribía a su madre y que aparece en su tumba.